Ofiuco, el cambio zodiacal
Polémica entre la Astronomía y la Astrología


Lic. Tamara Le Gorlois

El 22 de enero de 1995, la Real Sociedad de Astronomía Británica por medio de su portavoz, Jacqueline Mitton anunció que el Zodíaco esta equivocado.
Hay una constelación más, Ofiuco (originariamente Esculapio), conocida como Ophiuchus en la terminología científica, que alteraría las fechas de los demás signos. Por esto algunos astrónomos afirman que el zodíaco debería tener 13 signos, a la vez que todos los signos se retrasarían un mes.
Como el eje terrestre está inclinado en 23,5 grados, los astrónomos dicen que el cielo nocturno visto desde un mismo lugar varía con el tiempo.
Pero los signos del zodíaco no se rigen por la correspondencia física con las constelaciones.

Lo que dicen los astrónomos

El astrónomo Parke Kunkle, de la Minnesota Planetarium Society de los Estados Unidos, sostiene que dice que la interpretación de los movimientos celestes usada por la astrología para determinar los signos de acuerdo con la fecha de nacimiento de las personas, está errada. En la práctica, eso significa que la gente pertenece a un signo diferente.
Según Kunkle, hace 3.000 años, cuando se confeccionaron los mapas astrológicos, se tomó en cuenta la alineación del trayecto del Sol en el firmamento con el de las constelaciones estelares. Si la inclinación del eje de la Tierra fuese cero grado, una misma franja del cielo nocturno sería vista eternamente desde un mismo lugar.
Pero al ser las órbitas de los planetas elípticas y al tener el eje de la Tierra una inclinación de 23,5 grados, la porción que se ve del cielo nocturno cambia debido a la variación que sufre el posicionamiento del eje del planeta.
Las constelaciones tenidas en cuenta por los astrólogos hace 3.000 años para definir qué meses y qué días del mes corresponden a cada signo ya no serían las actuales.
Nuestro planeta órbita alrededor del Sol y además gira en torno de sí mismo. Las civilizaciones antiguas imaginaron esos movimientos como perfectos, con una órbita circular y un eje absolutamente vertical. Imaginaban una línea recta dibujada desde la Tierra a través del Sol, que continúa hacia el espacio, donde se encuentran las estrellas. Esa línea imaginaria giraría, apuntando a estrellas diferentes a lo largo de un viaje completo alrededor del Sol, es decir, a lo largo de un año.
Por ejemplo, actualmente el eje de la Tierra está alineado de tal manera que el Polo Norte apunta directamente a la Estrella Polar. Dentro de 12.000 años, el Polo Norte estará apuntando a la estrella Vega.
Dice Kunkle que no es correcto decir que el Sol estaba en Acuario el 21 de enero del 2011, porque en realidad estaba en Capricornio. Corregido según la observación de Kunkle, el calendario astrológico sufriría varias modificaciones. La fecha de cada signo se adelantaría cerca de un mes y Escorpio quedaría confinado a un corto período de 7 días. Por el hecho de que también se alinea con el Sol, la constelación de Ofiuco debería ser incorporada al horóscopo.
Astrónomos de la Nasa sostienen que las constelaciones difieren en forma y tamaño, por lo que el Sol pasa diferentes períodos alineado con cada una de ellas. La línea desde la Tierra a través del Sol apunta hacia Virgo durante 45 días, pero apunta hacia Escorpio durante sólo 7 días. Para que coincidiera prolijamente con su calendario de 12 meses, los babilonios no tomaron en cuenta el hecho de que el Sol en realidad se mueve a través de 13 constelaciones, y no 12. Y luego le asignaron a cada una de esas 12 constelaciones cantidades equivalentes de tiempo. Además de las 12 constelaciones conocidas del zodiaco, el Sol también está alineado con Ofiuco durante aproximadamente 18 días cada año.

La opinión de los astrólogos

Jerónimo Brignone, director de estudios de la Fundación Centro Astrológico de Buenos Aires es contundente: "Somos los astrólogos y no los astrónomos quienes decidimos cuántos signos usamos y dónde se hallan emplazados". "No sabemos hasta qué punto este tipo de afirmaciones son producto de la ignorancia o de la mala fe, dado que parte de la comunidad astronómica tiene una conocida aversión a la astrología y gusta de confundir al público en general en este tema, sea para desprestigiarla, sea para socavar su popularidad".
Dice que la constelación de Ofiuco toca en efecto la eclíptica, es decir, el recorrido del Sol a través del año alrededor del cual también se desplazan, desde una visión geocéntrica, los planetas del Sistema Solar y la Luna. Sin embargo, los antiguos babilonios y egipcios consideraron hace dos mil quinientos años solo doce constelaciones de la eclíptica para nombrar a doce divisiones iguales, que nunca coincidieron exactamente con las constelaciones respectivas, y que llamamos los doce signos del Zodíaco". "El punto de inicio para el primer signo (Aries) es el punto vernal, el lugar por donde el Sol cruza el Ecuador al iniciarse la primavera en el Hemisferio Norte. La astrología occidental siempre usó esta división de doce signos a partir de la intersección de los planos de los dos movimientos más importantes de la Tierra: rotación (Ecuador) y traslación (eclíptica), la que coincide con Las estaciones del año y no tiene ninguna correspondencia física con las constelaciones desiguales que rodean a la eclíptica".

ARIES: del 19 de abril al 13 de mayo
TAURO: del 14 de mayo al 20 de junio
GÉMINIS: del 21 de junio al 19 de julio
CÁNCER: del 20 de julio al 19 de agosto
LEO: del 20 de agosto al 15 de septiembre
VIRGO: del 16 de septiembre al 30 de octubre
LIBRA: Del 31 de octubre al 22 de noviembre
ESCORPIO: del 23 de noviembre al 29 de noviembre

OFIUCO: del 30 de noviembre al 17 de diciembre

SAGITARIO: del 18 de diciembre al 18 de enero
CAPRICORNIO: del 19 de enero al 15 de febrero
ACUARIO: del 16 de febrero al 11 de marzo
PISCIS: del 12 de marzo al 18 de abril

Al principio, Astrología y Astronomía iban a la par. Se encontraron imágenes en Alemania (de unos 5.000 años de antigüedad) con representaciones en oro del Sol, la Luna y las estrellas. Hace 4,5 milenios, los egipcios diseñaron un calendario de 365 días al año y 12 meses. Un milenio después, los babilonios confeccionaron la primera tabla astronómica, dividiendo el cielo en tres sectores de 12 zonas cada uno, sirviendo de base al diagrama zodiacal occidental. Durante 500 años, los romanos consideraron la Astrología una ciencia, tomando los emperadores sus decisiones en base a los consejos de los astrólogos.
En el Renacimiento, Nicolás Copérnico presenta su teoría de que es la Tierra la que gira alrededor del Sol y no al revés. Con esto comienzan a dividirse las opiniones de astrónomos y astrólogos, cosa que se acentuó cuando en 1996, los astrónomos decidieron dejar de considerar a Plutón como planeta, concepto que no se inmutó entre la mayoría de los astrólogos.


Ofiuco u Ophiuchus (el portador de la serpiente o Serpentario) es una de las 88 constelaciones modernas, y era una de las 48 listadas por Ptolomeo. Puede verse en ambos hemisferios entre los meses de abril a octubre por estar situada sobre el ecuador celeste.

Al norte de Ofiuco se halla Hércules, al suroeste Sagitario (Sagittarius) y al sureste Escorpio (Scorpius); al este se encuentran la Cabeza de la Serpiente (Serpens Caput) y Libra, mientras que al oeste quedan Águila (Aquila), Escudo de Sobieski (Scutum) y Cola de la Serpiente (Serpens Cauda). La constelación queda flanqueada por la Cabeza y la Cola de la Serpiente, que puede ser considerada como una única constelación: Serpiente (Serpens), que la atraviesa. El conjunto resultante es un hombre rodeado por una serpiente.

En la mitología griega, Ofiuco corresponde con Asclepio (Esculapio), hijo del dios Apolo y la humana Corónide. Era tan hábil en medicina, que se decía que era capaz incluso de resucitar a los muertos. Muy ofendido por ello, Hades pidió a Zeus que lo matara por violar el orden natural de las cosas. Zeus accedió, pero como homenaje a su valía, decidió situarlo en el cielo rodeado por la serpiente, símbolo de ascenso, sapiencia, vida renovada…

El Ouroboros, o serpiente que se muerde la cola, es el símbolo del Aion, o la palabra griega aion (duración, época, universo), proceso en el cual la energía primigenia, al ser fecundada, pasa a la multiplicidad; del mundo informal al mundo de las formas; del espíritu a la materia, para luego retroceder inversamente. Es la evolución general del cosmos o de la vida. Esto coincide con la tradición oriental, que entiende la vida del universo en dos períodos contrarios y complementarios: involución (materialización) y evolución (espiritualización).

Fuente consultada: Revista Noticias