Hablar con propósito

Hablar con propósito significa usar las palabras con intención, conciencia y dirección, en lugar de hablar por impulso, por reacción o sin pensar en el efecto que tendrán.

Se refiere a:

• Pensar antes de hablar: elegir palabras que sumen, no que resten.

• Comunicar desde la calma, no desde la emoción desbordada.

• Ser claro sobre lo que querés transmitir y qué impacto buscás generar en el otro.

• Conectar tu lenguaje con tus valores, tus metas y tu forma de estar en el mundo.

En otras palabras:

• Hablar con propósito es hablar desde la paz interior, no desde la reactividad.

• Es elegir construir puentes en vez de barreras con tus palabras.

• Significa que lo que decís y cómo lo decís tiene poder creador, por eso hay que hacerlo con presencia y empatía.

Hablar sin propósito	Hablar con propósito
“Siempre hacés todo mal”	“Esto no salió como esperábamos. ¿Cómo podemos mejorarlo juntos?”
“Estoy harta, no aguanto más”	“Necesito un momento para calmarme y después poder hablar bien”
“No me interesa”	“Gracias, pero hoy prefiero no participar en eso”

• “Lo que decís puede cambiar el clima emocional de un día entero.”

• “Tus palabras son semillas. Elegí bien lo que sembrás.”

• “Comunicar desde el alma es un acto de liderazgo.”